Es una buena noticia que lleguen ‘updates’ a las consolas cada poco tiempo si de por medio vamos a ganar en nuevos servicios y funcionalidades aunque, en esta ocasión, en Microsoft han dado un pasito hacia atrás y han vuelto a dejar las cosas como estaban previamente a la anterior actualización de su Xbox One.
Y es que al margen de que con el firmware que está llegando hoy mismo a nuestra ‘next-gen’ ganaremos algunas cosas, como un indicador de batería para los gamepads, mejores opciones de gestión del almacenamiento de Xbox One o hacer compatible la máquina con teclados USB, lo que más ha llamado la atención es la corrección del ‘sharpening filter’ que habían acentuado en la anterior actualización.
Este filtro de enfoque lo que hace es que las imágenes aparezcan más nítidas y menos borrosas, resaltando mucho más cada pixels y dando a los juegos una apariencia (teóricamente) más real y de mayor fluidez.
Pero como nunca llueve a gusto de todos, muchos usuarios han mostrado su contrariedad ya que este aumento del filtro provocaba unos más que evidentes dientes de sierra en los contornos de los polígonos, lo que no cuadraba mucho con la tendencia de las tecnologías gráficas en los últimos años que buscaban crear superficies cada vez más lisas y menos pixeladas gracias a los efectos de AA (antialiasing).
En la imagen superior podéis ver los cambios que se han producido en ese filtro de enfoque sobre una pantalla deTitanfall. Como podéis comprobar se ve mucho más acentuada la imagen que tenéis en la izquierda (la anterior actualización) que la derecha (el ‘update de hoy mismo).
De todos modos, para gustos los colores así que haremos una breve encuesta aquí mismo. ¿Qué imagen os gusta más? ¿La más enfocada de la izquierda o la más difusa de la derecha?