sábado, 15 de febrero de 2014

¿Podría acabar Xbox en manos de Amazon?


Los cambios producidos en los últimos días en la cúpula de Microsoft y en varios de sus departamentos ha vuelto a avivar las voces que apuntan a un supuesto alejamiento entre las oficinas centrales y la sección de videojuegos. Una vez más, se habla de una posible venta de la sección Xbox, y algunas de las grandes compañías podrían estar al acecho.
No es la primera vez que se habla de ello, y desde hace años, muchos analistas y expertos en la materia hablan de los planes de Redmond de deshacerse de su departamento de videojuegos. Algunos se atreven a decir que no genera los beneficios suficientes como para que una compañía así siga invirtiendo en ello, mientras que otros señalan los deseos de la compañía de centrarse sólo en su sección original, la del PC.
Sin embargo, la fabricante ha desmentido una y otra vez dichos rumores, asegurando la gran vitalidad que poseía el departamento y los beneficios anuales que le reportaba. Prueba de ello era el gran dominio que, hasta los años finales, ha mantenido su 360 en esta séptima generación de consolas.
Aún así, los más pesimistas seguían convencidos de que su sucesora, One, sería la última consola, si no de la firma, al menos sí en manos de Microsoft, dando por seguro su venta posterior.
Cambios en la dirección
Lo cierto es que estas voces habían decrecido con la llegada de la nueva consola. Sin embargo, los cambios en los cuadros de mando de Redmond han vuelto a reavivar las especulaciones sobre una cierta crisis de identidad de la compañía. En primer lugar, Chris Lewis, vicepresidente de Xbox en Europa decía adiós a MS después de 25 años de servicio, y tras seguir con detenimiento todas y cada una de las Xbox puestas a la venta. Abandonaba sin decir motivo alguno.
Más chocante resultaba la renuncia de Jason Holtman, antiguo director de Steam y llamado a ser el responsable de convertir Windows en la mejor plataforma de juegos. Holtman sólo ha durado seis meses en su cargo, y no ha dejado ningún tipo de justificación de su marcha.
Pero el posible divorcio provendría nada menos que del nuevo director ejecutivo de Microsoft, Satya Nadella, que se hizo con el cargo el pasado 4 de febrero y que muchos consideran poco afín a la sección de videojuegos, hasta el punto de que algunos medios han señalado la posibilidad de que estuviera planteándose seriamente la puesta en marcha de su venta, algo por lo que apostaría, aseguran, parte de los máximos dirigentes de la compañía.
Potenciales compradores
Hay que decir que todo ello sigue siendo simple rumorología, aunque parece que no hay forma de ponerle freno. ¿Lo hará finalmente? ¿Quién podría ser el mejor pujador? Obviamente, en caso de lanzarse al mercado, las miradas se dirigirían rápidamente a otras grandes compañías, siendo las favoritas Google, Apple y Amazon. Y no sólo por su poder adquisitivo, sino porque ya han mostrado en más de una ocasión sus intenciones de desembarcar en la industria del videojuego.
Principal candidata
De hecho, de las tres se ha estado hablando en los últimos años de sus posibles proyectos para lanzar una consola propia, si bien quien parece haber dado un salto más concreto ha sido Amazon, que, recordemos, no sólo se encuentra estudiando un modelo de videoconsola propio sino que recientemente se ha hecho con las riendas de Double Helix, responsables de Killer Instinct para, precisamente, Xbox One.
¿Es la principal candidata? ¿Se atrevería a hacerse con un departamento tan grande? ¿Necesita MS vender su sección? A corto plazo se antoja difícil que lo lleve a cabo, una vez que se encuentra en pleno surgimiento de una nueva generación, y, sobre todo, a raíz de los últimos movimientos que apuntan a un apoyo total a su nueva consola, como la compra de la saga Gears of War.
¿Creéis que finalmente sí la venderá? ¿A corto o largo plazo? ¿Estaría en buenas manos si la compañía de Seattle se hace con la firma?